26 de junio de 2014

Croacia. Día 3: Plitvice y Zadar - Junio 2014

La mañana de los Lagos de Plitvice salimos de Rovinj temprano en dirección a Rijeka.
El peaje a pagar hasta Rijeka es de 9,20€. Desde allí hasta Plitvice es una carretera secundaria, no demasiado bien señalizada (a ratos parece que estás perdido).
Por desgracia para quienes tengan prisa o pocas ganas de conducir (tardamos unas 3hs y media), o por suerte para quienes adentrarse en la historia les emocione, esta carretera va pasando por infinidad de pueblos marcados por la guerra.

Las imágenes son imperdibles. Pueblos modestos, pueblos nuevos, pueblos a medio construir o medio destruidos y pueblos fantasma.
Miles de marcas de bombas y balas en las fachadas, y pequeños pero imponentes cementerios cada pocos kilometros.
Aunque el trayecto se hace largo, el paisaje merece la pena. Mucho verde, campo y diminutos pueblos donde parar sin problema.



El Parque natural de los Lagos de Plitvice
tiene dos entradas.

Imprescindible:
Botella de agua
Protector solar
Ropa y zapatillas cómodas

Lo mejor es entrar por la entrada principal donde se encuentra el parking, tienda, bar-restaurante, etc.
El parking cuesta 7Kn/h, aprox 1€.
La entrada general de adulto, en la fecha en la que fuimos, cuesta 15€. Si podéis presentar carnet de estudiante, de cualquier tipo, os cobrarán la entrada a 11€. Nosotros presentamos el carnet de la Universidad Autónoma de Madrid y nos sirvió.

Tras comprar las entradas, y para no perder tiempo dentro, comimos algo antes de entrar. El restaurante de la entrada tiene bocadillos, hamburguesas, perritos, patatas y bebida a precios baratos.
Hamburguesa (grande) + Bocadillo de queso + dos raciones de patatas fritas = 9€.

Lo más importante, si es que no lo lleváis ya encima, es la bebida. Aunque el parque está lleno de sombras de arboles, la caminata bajo el sol es intensa. Conque llevéis una botella pequeña es suficiente, porque hay fuentes durante el camino y baños para poder rellenarlas de agua potable.

Una vez dentro del parque podéis escoger, a vuestro antojo, entre varios itinerarios, dependiendo del tiempo y las ganas de hacer kms que tengáis.
Elegimos el trayecto de 4hs y no se nos hizo pesado, sino todo lo contrario. Vistas maravillosas, zonas de descanso, fotos, fotos y más fotos.

No dudéis en ir al Parque natural porque merece la pena 100%.

La entrada incluye un recorrido en barco (20'), que nos dejará en otra orilla de los lagos (todo muy bien señalizado por itinerario escogido) y un trayecto en bus que nos deja a unos 10' de la entrada prinipal donde dejamos el coche.


En total casi 5hs de recorrido y paseo entre aguas cristalinas, miles de peces, alguna que otra serpiente de agua, insectos y ratoncillos que nos acompañaron en nuestro ultimo tramo.


Las zonas de descanso y los baños están muy bien cuidados, no son de pago, y tienen agua potable, fría, y papel higiénico. Además en la explanada donde se coge el barco, que sale cada 30', hay otra zona de descanso grande que nos recordó al campamento de la Inicitiava Dharma de Lost, con otra cafetería, y donde se espera al bus, hay otra tambien.

Tras salir de los Lagos con colorcito rojizo en nuestra piel y un poco de cansancio, nos dirigimos hacia Zadar.

Habíamos reservado habitación en Rooms & Apart. Linda & Mario (30€).

Hotel fácil de localizar, alejado del centro, pero ideal si vais en coche (10') ya que tiene además parking gratuito.
La habitación era muy cómoda, con baño, televisión y nevera dentro de la habitación, y salida al patio.
Linda es super atenta, nos dio información de todo tipo y estuvo pendiente de nosotros en todo momento.

Zadar es otro sitio que tiene magia. Visitamos el centro, GradZadar, al llegar. Cruzamos su magnifíco puente y paseamos durante horas (Hay wifi gratuito en todo el centro histórico).
Muchos sitios para comer, un ambiente increíble y musica por todos lados. Pero todo con mucho encanto. Su plaza principal, llena de sillas de terrazas, nos recibía con un concierto de musica clásica, y a medida que nos íbamos adentrando en las callejuelas la música iba cambiando, pero con el mismo gusto.


Cenamos en una terraza, al fresquito, Fast Food Zadar, ensalada, patatas fritas, pizza y dos bebidas por 13€...
Nos tomamos el helado de rigor y visitamos el Órgano del mar (enlace) y el Saludo al sol (enlace).

Al llegar al hotel, no pudimos evitar buscar videos en Youtube con imágenes de Zadar entre los años 1991 y 1993... no entendíamos cómo un lugar con una atmósfera tan chula podía haber pasado por eso...

A la mañana siguiente volvimos a bajar al GradZadar con el coche, antes de proseguir camino.
Su arquitectura y sus monumentos, algunos tan bien conservados a pesar de las huellas de la guerra, nos sorprendieron nuevamente.
Ese ambiente que nos encantó la anoche anterior seguía ahí, esta vez iluminado por el sol.
Compramos café y bollos en una panadería al lado de la plaza, y dejamos una ciudad que no esperábamos que nos dejase huella...


Aprovechamos para agradecer a @eZadar, @ZdWalks, @petbunara, @borazadar, @turismocroacia, @visitacroacia y muchos habitantes de Zadar su seguimiento en twitter de nuestra visita y sus retweets!
                                                                             Gracias!! 

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